¿Por qué enamorarse de Calafate haciendo turismo a través de su flora?
El Calafate supone una oportunidad única de conocer una gran cantidad de glaciares, como el conocidísimo Perito Moreno que no debe perderse. No obstante, no todo turismo consiste en visitar glaciares, realizar cualesquiera de las prácticas deportivas como el caso del trekking o similares, que pueden ser practicadas en Calafate, puesto que esta bonita ciudad tiene mucho más que ofrecer.
La flora de Calafate incluye extensas vegetaciones de bosque en la que presentan una mayor predominancia, bosques de Nothofagus. Tanto es así, que en Calafate podemos encontrar tres variantes de esta especie de Nothofagus, concretamente son las especies del Nothofagus pumulio, el antártica y también, el betuloide.
Por otro lado, resultan igualmente destacables otras especies herbáceas y de frutas autóctonas del lugar como es el caso del enebro, la canchalagua, el maqui, el saúco o el propio calafate que posee entre sus diversas propiedades, las antioxidantes por contar con poli fenoles que presentan estas funciones antioxidantes. Estos antioxidantes, son realmente importantes para el ser humano porque previenen de los diversos efectos que pudieran producirse como consecuencia del paso de los años, incidiendo positivamente en la posibilidad de combatir el envejecimiento de las células del organismo.
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